Re: [escepticos] Debate (O posible flame :-)) Segregación de estudiantes.

[Inés G.A.T.]

Hola, Paco, ahí va mi opinión:

Me parece que los alumnos que destaquen deberían ser enseñados de
acuerdo con sus capacidades, del mismo modo que los alumnos que tienen
más dificultades para seguir el ritmo de la clase deberían poder
contar con clases de apoyo. Depende mucho de la institución educativa,
pero tengo entendido que lo segundo ya existe en colegios e institutos
públicos y privados, aunque no sé si en todos. Los alumnos inmigrantes
con problemas para seguir la clase en español, tienen en muchos sitios
clases de español. Me parece estupendo hacer la enseñanza todo lo
personal que sea posible con el fin de aprovechar mejor las
capacidades de cada cual y de ayudarle con sus dificultades personales
si las hubiere.

Y ahora llega el "pero". Considero que cualquier institución educativa
(incluso la Universidad, en cuanto que institución educativa) tiene
una doble función: transmitir conocimientos y capacitar a quienes los
reciben para aprovechar esos conocimientos en beneficio propio y en
beneficio de la comunidad. No estoy muy segura de las siguientes
palabras, pero tal vez alguien utilizaría esta expresión para decir lo
que yo quiero decir: "implementar" esos conocimientos para conseguir
un provecho propio y un provecho social. ¿Me explico? Bien, pues esta
segunda función no puede realizarse si a los educandos se les aísla de
la sociedad. La sociedad es diversa (afortunadamente, según mi punto
de vista): convivimos tontos, listos, malos, buenos, hispanohablantes,
nacionales, inmigrantes, gente que no habla español, mujeres,
hombres... Si sólo atendemos a la primera función de una institución
educativa, "transmitir conocimientos", creo que lo mejor es segregar
al personal, las mujeres aprendemos de una manera, la gente que llega
sin hablar español aprende de otra, los que son más lentos aprenden a
otro ritmo que los que son más listos... Totalmente de acuerdo, si
sólo queremos transmitir conocimientos, se transmiten mejor dividiendo
al alumnado. ¿Y qué ocurrirá luego? Que, probablemente, todos acabarán
aprendiendo mejor, unos tardarán más, otros menos, unos aprenderán
antes unas cosas y otros aprenderán antes otras. Pero no sabrán
utilizar esos conocimientos para provecho de una sociedad diversa,
porque no sabrán cómo aprende y cómo razona el resto de sus
conciudadanos, los que son diferentes a ellos por inteligencia, sexo,
lengua materna... Eso se aprende muy bien estudiando "codo con codo".

¿Cómo conciliar ambas funciones de una institución educativa, tratando
al mismo tiempo de que cada una de ellas se cumpla con excelencia? En
mi opinión, siempre tiene que haber un escenario común, unas
asignaturas comunes, de hecho, las que yo calificaría como
"troncales". Y, a partir de ahí, bienvenidas sean las "clases de
apoyo", las "clases de español/catalán/euskera/gallego", las "clases
para los que destacan en mates", las "clases para los que destacan en
actividades físicas", las "clases para los que destacan en materias
artísticas", e incluso, por supuesto, las  "clases para listos" (jeje,
supongo que habría que pulir esta última denominación).

Es mi opinión, y me interesa bastante el tema. Un saludo,




El día 8 de abril de 2011 08:28, Paco Gaspar <fjgaspar en gmail.com> escribió:
> Hola,
>
> Me ha sorprendido que no haya salido el tema en la corrala, de modo que lo
> saco yo, porque me parece interesante, y porque no tengo una opinión clara
> al respecto y me gustaría conocer la vuestra. Se trata de la medida
> impulsada por Espe en Madrid para potenciar colegios donde solo estudien el
> bachillerato niños con notas brillantes en los cursos anteriores.
>
> Personalmente, pienso que la situación de la educación en España es entre de
> vergüenza y penosa, y que a causa del nefasto sistema educativo que tenemos,
> se están perdiendo sin duda grandísimos talentos. Mi hijastra, por ejemplo,
> con 14 años, es incapaz de escribir un texto de más de 40 palabras seguidas
> sin faltas de ortografía (sin faltas graves), y para hacer una operación
> matemática dificilísima como por ejemplo multiplicar 24 por 100, necesita la
> calculadora. Y no es porque sea torpe, porque en su colegio, hasta a los
> niños que sacan todo con sobresalientes les ocurre lo mismo. He visto cosas
> tan absurdas como que saque un 9 en un examen de lengua teniendo en ese
> examen no menos de 20 faltas de ortografía, algunas tan graves como poner
> 'acer' en lugar de 'hacer', o 'aver' en lugar de 'haber'.
>
> Así las cosas, entiendo que en España hace falta una reforma profunda del
> sistema educativo, pero no tengo claro hasta qué punto puede ser un buen
> comienzo separar a los alumnos aventajados del resto. Por una parte, es
> bueno, porque de ese modo no serán frenados por los que tienen menos
> facultades intelectuales (en España se ha impuesto la tendencia de acercarse
> a la igualdad de oportunidades por abajo), pero por otro, no sé hasta qué
> punto es sano privarles de contacto con otras personas con menos capacidad.
>
> Luego está el hecho de que la medida la ha propuesto quien la ha propuesto,
> y a mí esa mujer me produce un repelús innato que me predispone a rechazar
> cualquier cosa que venga de ella, pero en este caso quiero anteponer mi
> espíritu crítico e intentar abstraerme del origen de la propuesta. Y al
> hacerlo, le veo ventajas e inconvenientes.
>
> ¿Qué opináis?
>
> Saludos
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Inés G.A.T.