[escepticos] Si te descuidas, te provocan

[Inés Toledo]

F. Mercader:

A mí no me resulta difícil entender  que un pederasta se sienta
'provocado' por un gesto equívoco y hasta lo puedo llegar a  excusar,
atribuyéndolo a nuestra facilidad para combinar imágenes mentales  de
la misma forma que echamos mano de fantasías sexuales de otros
tipos...mientras no pase de un  proceso mental privado y no convertido
en acto  externo que implique a otros.

Afortunadamente, sobre las fantasías nadie, salvo uno mismo, puede
establecer ningún tipo de coacción. Cada cual, como bien dices, es muy
libre de pensar el lo que le de la gana para excitarse.

Pero poseer materiales es ir más allá de un proceso mental interno. No
añado nada, ya que David ha respondido a eso mejor de lo que yo podría
hacerlo.

Yo analizo minuciosamente las fantasías que me excitan, especialmente
aquellas que me resultan inquietantes, y probablemente hablaría con
profesionales sobre algunas de ellas, puesto que llevo analizando los
mecanismos que subyacen a mis emociones durante mucho tiempo. Pero esa
soy yo, un tanto agobiadiza.

Afortunadamente, sé que muchas fantasías están muy bien donde están,
en el terreno de la fantasía, donde el comienzo, el desarrollo, el
final, y el entorno, son los que tu imaginas. Cuando se llevan a la
realidad suelen ser bastante decepcionantes.

No sé si alguien que se obsesiona con una fantasía muy particular es
más proclive a intentar llevarla a la realidad, dependerá de su
impulsividad y de la necesidad de experimentar estímulos fuertes...
Eso es lo que me da un poquito, poquito de miedo, cuando sé que
alguien ya no piensa, sino que se obsesiona con historias
inquietantes, y le impiden disfrutar de las múltiples posibilidades
del sexo real.

-- 
Inés

http://blogdeinestoledo.blogspot.com/