[escepticos] no sera cientifico...
Oldno7 ( Guillermo Hernandez)
guillermo en QuerySoft.es
Mar Jul 24 19:54:02 WEST 2012
...pero a mi me suena sensato. ¿o no?
Claro que, cabezon que soy, a mi me habia quedado claro hace meses
(desde que lei a aquel sevillano desmontando el "money as debt") que
nuestro BCE O lo que sea eso) "se la pasa manoseando, caramba, samba, su
dignidad". O sea, que ni chicha, ni limona.
Y entre todos la mataron...
http://blogs.publico.es/vicenc-navarro/2012/07/24/%C2%BFpor-que-la-sabiduria-convencional-esta-equivocada/
El editorial de /El País/ del pasado 21 de julio (/Situación crítica/)
presenta la postura que caracteriza el pensamiento dominante en el
/establishment/ español sobre la situación financiera del país. Tal
editorial indica que los mercados financieros no están respondiendo a
las medidas de austeridad muy marcada puestas en marcha por el gobierno
español presidido por Rajoy. Por el tono del editorial, su autor parece
asumir que los mercados deberían haber tomado nota de tales medidas y
recuperar su confianza en el Estado español, exigiendo unos intereses
más bajos a su deuda pública, los cuales han alcanzado niveles que son
inasumibles. Este supuesto que asume que el Estado español "tiene que
hacer sus deberes" (lo cual implica en el lenguaje del /establishment/
español recortar y recortar gasto público, entre otras medidas, para
reducir el déficit público) a fin de recuperar "la famosa confianza de
los mercados" está justificando toda una serie de medidas que están
llevando al país al desastre. Ignora, además, un hecho clave: el tamaño
de la deuda pública y del déficit no es la causa de que la prima de
riesgo esté ya por las nubes en España.
¿Cuál es, pues, la causa? Y la respuesta la hemos estado señalando unos
pocos sin que se nos hiciera caso desde hace ya tiempo. El hecho de que
España tenga una prima de riesgo tan elevada se debe a dos factores.
Uno, a que España no tiene un Banco Central. Si lo tuviera, éste haría
lo que hace un Banco Central digno de su nombre: imprimiría moneda y con
ella compraría deuda pública, forzando la bajada de los intereses de su
deuda. Esto es lo que hace el Banco Central estadounidense (The Federal
Reserve Board), el Banco de Inglaterra, el Banco del Japón y un largo
etcétera. El editorialista de /El País/ no ha captado todavía (como
tampoco lo ha captado el /establishment/ español) que los intereses de
la deuda pública no los determinan los mercados financieros, sino
predominantemente el Banco Central del país que genera la deuda. Al no
tener un Banco Central, consecuencia de estar en la Eurozona, España no
puede regular los intereses de su deuda pública. Y como consecuencia,
éstos suben y suben porque es lo que le conviene a los mercados
financieros, que se ceban y enriquecen a base de tales escaladas en el
precio de la deuda.
El segundo hecho que explica la elevada prima de riesgo de la deuda
pública española es que, además de no tener un Banco Central, el que así
se llama en la Eurozona (el Banco Central Europeo (BCE)) no es un Banco
Central, sino que es predominantemente un /lobby/ de la banca alemana.
El /establishment/ español parece que no ha captado esto tampoco. Si
fuera un Banco Central imprimiría dinero y compraría la deuda pública de
los Estados de la Eurozona que pagan unos intereses exagerados por su
deuda. Con ello, los intereses bajarían. Pero el BCE no hace esto. Dice
que lo tiene prohibido (aunque lo hace muy de vez en cuando, en
situaciones extremas). Lo que sí hace es imprimir dinero y se lo presta
a la banca privada a unos intereses muy bajos (0,75%) y con este dinero
la banca compra deuda pública a unos intereses elevadísimos (un 7% y un
6% en el caso español e italiano). ¡Un negocio redondo!
Ahora bien, el BCE se pasó de rosca. Y ahora, la banca privada
(incluyendo la alemana) está llena de bonos públicos y privados de los
países periféricos y le preocupa que ahora los Estados de estos países
no puedan pagar. Alemania posee la friolera cantidad de 770.000 millones
de euros de deuda pública y privada de los países intervenidos (Grecia,
Portugal, Irlanda y España). De ellos, 274.000 millones en España. Los
dos bancos alemanes más importantes, el Deutsche Bank y el Commerzbank,
tienen cada uno 14.000 millones de euros. La banca alemana tiene gran
cantidad de deuda pública y privada española (que le ha proporcionado
excelentes intereses, y por lo tanto, beneficios), y ahora quiere
asegurarse de que España no colapse y se quede sin cobrar la deuda. De
ahí la "ayuda" financiera, que en realidad es ayuda a la banca alemana.
Y de ahí que el BCE esté presionando para que estos Estados paguen lo
que deben a los bancos alemanes, entre otros. La famosa ayuda financiera
a la banca española (100.000 millones de euros) es primordialmente una
ayuda a la banca alemana (entre otros bancos) tal como indicó
recientemente con toda franqueza Peter Bofinger, consejero económico del
gobierno Merkel en su entrevista a /Der Spiegel/ (14.07.12), señalando
que "esta ayuda no es a estos países, sino a nuestros propios bancos,
que tienen gran cantidad de la deuda privada en aquellos países" (ver mi
artículo /La economía alemana no es un ejemplo/
<http://www.vnavarro.org/?p=7530> en www.vnavarro.org).
Una última observación. Creerse que el euro está en peligro porque la
prima de riesgo española está en las nubes (como asume también el
editorial de /El País/) es desconocer el sistema de gobierno de la
Eurozona. El euro le está yendo pero que muy bien al Estado alemán y a
la banca alemana. Como he detallado en otro artículo (ver artículo
citado) a los mayores bancos alemanes les está yendo muy bien, y los
bonos públicos del Estado alemán son los más seguros que hay en el mundo
(junto con los estadounidenses). ¿Dónde está, pues, el problema del euro?
El problema para el euro y para la banca alemana sería si España se
saliera del euro, que es lo último que el /establishment/ alemán y
europeo desearían, pero que España debería considerar seriamente como
alternativa. El BCE no cambiará a no ser que perciba el peligro que
supone para la banca alemana que España salga del euro. Y tal percepción
no ocurrirá mientras el gobierno español siga dócilmente lo que le digan
el BCE y la Comisión Europea, pues los intereses de éstos no son los
intereses de la población española, sino los intereses financieros
alemanes que dominan aquellas instituciones. Pedirle al BCE que ayude al
Estado español porque éste "está haciendo sus deberes" (tal como termina
el editorial de /El País/) es no entender quién y cómo la Eurozona está
gobernada.
Más información sobre la lista de distribución Escepticos