[escepticos] Agresiones machistas en San Fermin

[Francisco Mercader]

[Paco Gaspar]
No. Lo lamento pero no se puede justificar una agresión sexual en que
una prójima haya enseñado las tetas.

[Mercader]
Creo que la clave se podría buscar en mi frase del primer mensaje: 
"¿Cuál es, el comportamiento esperable de algunos miembros de estas dos 
partes -que, quizás no hayan madurado lo suficiente para convivir 
tranquilamente  en  sociedad- cuando se encuentran en un entorno 
favorable como las fiestas de San Fermín?".

Creo que nos olvidamos de que  nuestro comportamiento en una sociedad 
actual  no es el comportamiento, digamos, habitual que podría ejercer 
uno de nuestros antepasados  neandertales  cuando su mayor ocupación 
podría consistir en robarle comida o hembras  al de la tribu de al lado. 
Hemos inventado normas sociales pudorosas y de comportamiento cortés 
intentando no mirarle el culo a la secretaria para que no se nos tilde 
de machista. Pero estoy convencido de que debajo de la capa   de 
represiones sociales  que nos hacen posible la convivencia subyace  un 
cúmulo de pulsiones que emerge con muchísima fuerza por ejemplo, en una 
guerra, donde  sale el paleolítico que llevamos dentro y que se dedica a 
violar sistemáticamente a las mujeres del enemigo porque eso es parte 
del botín y de la sensación de victoria. ¿alguien se ha preguntado por 
qué sigue sucediendo lo mismo en cuanto hay oportunidad (y ocurre en 
Europa; no hay que irse a la selva) y eso que estamos a unas decenas de 
miles de años  del inicio de nuestras culturas?   Ferias como la de San 
Fermín son lo más parecido a ese escenario en el que, con las 
inhibiciones  neutralizadas por el vino, aparece el ser real que 
responde automáticamente a los estímulos  reconocibles   que ha desatado 
una inconsciente. Y eso de que cualquier prójima tiene derecho a enseñar 
toda la carne donde quiera, es verdad; faltaría más que hoy, alguien se 
lo prohibiera. Pero está claro que la chica ignora los mecanismos 
elementales por los que seguimos funcionando  los estúpidos miembros de 
esta especie y no sabe que está iniciando  claramente un ritual de 
apareamiento inscrito en sus genes  y que se manifiesta enseñando sus 
atributos  a los machos cercanos. Del comportamiento de una idiota entre 
una multitud de idiotas  no cabe esperar otra cosa que la que pasa. Hoy 
día nos resultan ridículos  aquellos apolillados valores de "decencia", 
"pudor" "honestidad" que se manejaban en la sociedad que nos ha 
precedido. Pero olvidamos que eran los mecanismos simples que  se 
empleaban -con el disfraz de la llamada "moralidad"  para conseguir la 
convivencia sin asaltos, violaciones, embarazos no deseados que 
alterasen la sociedad. Hoy hemos prescindido afortunadamente de la 
represión moral relativa al sexo pero  se nos ha olvidado que la 
cuestión es mucho más compleja  al colisionar dos elementos difícilmente 
reconciliables como es la cultura adquirida (débil cáscara que salta  a 
la menor ocasión)   contra el comportamiento animal, que sigue siendo 
igual de fuerte que antes.

Ah, y ya veo por algún mensaje que va apareciendo por ahí que  no ha 
desaparecido el entorno hostil de la lista.  Lástima. 


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