[escepticos] (sin asunto)

Inés G.A.T. inesucu en gmail.com
Dom Mar 16 09:09:11 WET 2014


El 15 de marzo de 2014, 23:55, Akin <akinlg en gmail.com> escribió:

> El 15 de marzo de 2014, 23:29, Francisco Mercader <
> mercader en franciscomercader.es> escribió:
>
> > [Jose Manuel Fernandez]
> >
> > Por supuesto, donde se ponga un político bien parecido, de chaqueta,
> > impecablemente peinado y licenciado en Economía como Correa que se quite
> > Nicolás Maduro, conductor de autobuses y barrigón. ¡Seguro que le huelen
> > las axilas y el bigote le chorrea cuando come sopa y eso le impide
> trabajar
> > por su pueblo!
> >
> > [Mercader]
> > No va por ahí la cosa. Pertenezco a una estirpe de  conductores y
> > barrigones y tengo muchísimo respeto por la gente humilde, tanto como
> > desconfianza por la gente trajeada y bien peinada.
> > Pero  siento una enorme alarma por los sujetos  bocazas, arbitrarios,
> > amenazadores  y vociferantes. Los detalles externos revelan  muy bien lo
> > que suele ir por dentro. El anterior me merecía más respeto.
>
> (Akin)
> A mí en cambio me dan mucho más miedo los sujetos educatos, finos,
> elegantes y pulcramente vestidos. Cuando pienso en la gente que está
> destruyendo esta sociedad a pasos agigantados, me salen todos así.
>
>
(Inés)
A mí, miedo no, pero bastante repelús, me da la gente que critica y
desprecia el aspecto físico del prójimo, sea el que sea. No voy a decir que
yo sea un angelito, a veces se me escapa un cotilleo (hace poco Akin me vio
en facebook llamando a Camps hortera de casino, en mi descargo alego que
legitimo mi crítica frívola por la crítica moral menos frívola que me
merece el personaje).

En general, al margen de sus acciones políticas, por mera convivencia,
prefiero que alguien vaya aseado, si vive en condiciones muy duras puedo
disculpar el desaseo. Y prefiero que alguien tenga buenas maneras al comer.
Y pienso que todo lo anterior no debería tener que ver con si la persona
tiene barriga o luce los abdominales de C.Ronaldo, lleva bigote y poblada
barba o es lampiño, va con traje de Armani, con chándal de mercadillo, o
con bermudas y frac. Y pienso que el aseo y la elegancia no tienen por qué
ser patrimonio de ninguna tendencia política.

Me vais a perdonar que me tome esta cuestión de "educados, finos y
elegantes a la par que pijos cabrones de marca mayor" vs. "gente obrera de
bien que no se preocupa de asearse porque está todo el día currando en la
revolución, que es mucho más profundo" como un poco personal. Odio esa
falsa dicotomía, me parece dañina a más no poder y me parece frívola y
aborregante.

Ya digo que es algo personal: nunca he estado en ninguno de esos dos grupos
y he recibido desprecios de ambos por muy frívolos motivos. Nunca he sido
una niña pija, y me lo hicieron pasar bastante mal en su día por mi poco
acierto en el vestir, parece una tontada enorme, pero se me quedaron
grabadas aquellas burlas. Hoy, veinticinco años más tarde, ciertas
conversaciones frívolas de pijos me hacen sentir muy incómoda. Pero buena
parte de la gente de "movimientos alternativos de izquierda" me ha
considerado aburguesada, ñoña y alienada por la sociedad patriarcal de
consumo. Porque un día aparezco con un vestido por encima de la rodilla con
zapatos de tacón, a quién se le ocurre. Para colmo, llevo el apellido de
una familia aristocrática, y eso ya debe invalidarme completamente como
elemento útil para la revolución.

Una de las ventajas de dejar de ser joven es adquirir la capacidad de
reírse de los juicios que hacen sobre una misma quienes se basan en cuatro
estereotipos. Es cierto que, como dice Akin, quienes más están dañando al
mundo son los "estúpidos hombres blancos" que decía en uno de sus libros
Michael Moore. Pero hay muchos W.A.S.P. (muchos "aseaditos", en general,
aunque no sean blancos y protestantes anglosajones) que hacen grandes cosas
por la sociedad, que son gente buena y admirable y merecen mi respeto,
lleven la pinta que lleven. Y hay muchos que nunca jamás se pondrían una
corbata, porque va contra sus principios, que consideran que tirar de la
cadena es de sucios burgueses (esto último se basa en una anécdota real que
vivieron mis padres, hay que flipar con la "guarrada proletaria"), que
llevan toda la vida de curritos sindicados y activistas y son gente mala,
pero MALA con mayúsculas, a los que yo no tendría cerca jamás, porque esos
principios que les impiden llevar corbatas no les impiden hacer daño al
prójimo.

Siento si esto ha sonado como un desahogo, ya digo que llevo toda mi vida
arrastrando algo que ya sufrieron mis dos progenitores y yo heredé: ser de
aquí, de allí y de en medio, y que me caigan desprecios frívolos de todos
lados porque alguien se fije más en si llevo camiseta o blusa o en mis
apellidos que en lo que voy haciendo cada día. Pobres de espíritu...

Por cierto, Maduro me parece impresentable. Pero impresentable del todo.
Por cómo le he oído hablar, su bigote o su chándal me resbalan. Su tono y
sus palabras meten miedo. Sé algo de lo que se ha ido consiguiendo en
Venezuela, pero yo no podría votar a un tipo que habla con sus electores en
clave de burricie total, como si fuera el líder de una panda de hooligans.
Diego Cañamero (al que no sé si yo votaría) también va de chándal (bueno,
de camiseta y vaqueros) y nunca le he oído hablar en ese plan borrico.


-- 
Inés G.A.T.


Más información sobre la lista de distribución Escepticos