[escepticos] Los delegados del gobierno

[marmi]

Eloy Anguiano Rey escribió:
> El jue, 21-08-2008 a las 12:39 +0200, Miguel Martínez Estremera
> escribió:

>> Y no es que lo envidie yo, quien lo envidia es la sociedad, que hace  
>> cola en las oposiciones. Algo tendrá la vida de funcionario.
> 
> 
> No tanta cola que sólo son unos pocos miles de personas en toda España.

Pues últimamente, Eloy, tu incontinencia en el número de mensajes que 
envías e esta Agostada corrala es sólo superada por lo poco riguroso de 
tus opiniones. Esta ya la has bordado.

Esos "pocos miles en toda España" que comentas son, en grandes números, 
1 de cada 8 españoles activos, es decir, unos 2 millones y medio.


> Lo que tiene la vida de funcionario es la estabilidad. Sabes con qué
> dinero cuentas y puedes contar, aunque sea poco.


Pues tampoco es del todo exacto, ya que algo menos de la mitad de los 
funcionarios tienen plaza en propiedad: el resto son laborales y otro 
tipo de empleados. Si bien su seguridad en el empleo es algo superior a 
  muchas empresas privadas, no son "intocables"

Entonces, y con datos en la mano, me sorprende esa defensa a ultranza 
que haces del sector público, que tan bien dices conocer. Porque yo 
también lo conozco bastante, y no me cuesta excesivo trabajo 
identificar, con nombres y apellidos, a funcionarios que van al super en 
horas de trabajo, van a comprarse unas gafas y luego a almorzar y luego 
a recoger a las nenas y... vaya! se me ha ido la mañana".., o 
simplemente llevan sin aparecer por su puesto de trabajo meses enteros 
(sin baja médica ni excedencia de por medio). Si bien no son la norma, 
tampoco son tan difíciles de encontrar y te puedes considerar un 
verdadero autista si no sabes de qué estoy hablando. O eso, o tu 
universidad es la hostia en verso.

En fin, el sector público es un ecosistema bastante curioso en el que 
los comportamientos aberrantes no son una característica de los 
individuos sino una consecuencia de las presiones adaptativas a las que 
están sometidos (más bien: la falta de las mismas). Es un sistema en el 
que no se castiga al improductivo y no se premia al productivo. Lo cual 
conduce, lógicamente, a que la mediocridad sea la estrategia más 
parsimoniosa. Los funcionarios que trabajamos 50 horas semanales y 
ponemos todo nuestro interés y profesionalidad en lo que hacemos, 
recibiendo a cambio congelaciones salariales (de todos los gobiernos, 
derechas e izquierdas por igual) y mismo trato que los vagos, somos unos 
simples inadaptados. Dicen que el tiempo todo lo cura.




>> Pero en fin, todo depende del color conque uno lo mire...
> 
> En efecto.


Pues va a ser eso. 2500 miles de afanados trabajadores. Si estuviesemos 
en una constructora habríamos asfaltado la vía láctea completa.

Salud,

marmi