[escepticos] Dios omnipotente y tal

[Francisco Mercader]

[Miguel Martínez Estremera]
 Yo creo en la existencia de Dios (sin pruebas) como ser externo al
Universo, y creo todo lo que los sentidos me muestran y la ciencia me da
como cierto.

[Mercader]
Vale. Yo creo en la inexistencia (sin pruebas) de tal ser, simplemente,
por considerarlo imposible.
Pero más que la existencia de Dios, lo que me interesa es el porqué y el
cómo la gente —incluso personas ilustradas— llegan a esa creencia, así
como en la posibilidad de vida después de la muerte y cosas así. Me
parece que conocer ese proceso podría ayudar a comprender otras
circunstancias acerca de nuestro comportamiento.
Hace  unos meses sufrí la pérdida de un ser muy querido y creo que  el
episodio me brindó algunas pistas sobre  el tema. Fui testigo en primera
fila de cómo la mente  se defiende del dolor  con recursos que, de no
estar preparado  con una buena dosis de escepticismo, podrían sorprender
a alguien poco crítico. Comprobé cómo la imaginación  se desborda en
momentos como esos, sobre todo porque dejé fluir el proceso libremente,
quizás para ayudarme en el consuelo  y entonces empecé a creer algo que
ya sospechaba pero que no había vivido en primera fila hasta ahora: que
las religiones y las creencias en mundos inmateriales podrían no ser
sólo el producto de la estafa de unos cuantos vividores; deben  de ser
el resultado de  recursos defensivos de la mente para aliviar temores,
dolor por la pérdida de seres queridos o como compensación por carencias
en la vida real. 
Naturalmente, no he  experimentado la menor duda ni he sufrido la menor
resquebrajadura en el sólido muro de mi escepticismo pero reconozco que
me he quedado sorprendido por la intensidad con que  estos recursos
acosan la racionalidad para retorcerla y con qué facilidad se agarra uno
a ellos para sobrellevar la situación. No me extraña en absoluto que  el
culto a los  antepasados haya sido, probablemente, una de las primeras
manifestaciones humanas  de la creencia en mundos 'virtuales'.
Tampoco me extraña que la creencia en diversas religiones esté tan
extendida a lo largo de la Historia. Ahora ya creo que este tipo de
distorsión en la lógica acompaña al ser humano de manera inevitable
porque es, simplemente, uno más de nuestros mecanismos de defensa.


El ser querido al que me refería no era una persona pero, a los efectos,
da lo mismo:
http://personal.telefonica.terra.es/web/fmercaderr/soloeraunperro1.htm