Mi respuesta ha sido un tanto impulsiva, y nacida de la impaciencia de una paciente que ha visto demasiadas fluctuaciones en la orientación de su farmacoterapia antidepresiva. En general, confío en el buen hacer de los psiquiatras.
<br><br>En ocasiones, la carrera farmacológica en el tratamiento de la depresión no ha dado los resultados esperados, incluso ha tenido efectos bastante desagradables (ay, el Prozac que iba a ser tan milagroso...). <br><br>
Creo que hay cierta desconfianza y escepticismo entre los pacientes que hemos experimentado muchos cambios en nuestra medicación (siguiendo las "tendencias" de la farmacoterapia antidepresiva, me atrevería a decir) sin que éstos redundaran claramente en nuestro beneficio.
<br><br>No cabe duda que esto ocurre en todos los campos de la medicina, cuanto más en psiquiatría, dado que el cerebro es un órgano de funcionamiento complejo. <br><br>Ojalá que se descubran tratamientos más efectivos, y que muchos nos beneficiemos de ellos. Pero, tras marear la adrenalina, la noradrenalina, la serotonina, las dos o las tres a la vez, tras haber combinado todo eso con benzodiacepinas, y, últimamente, con los antiepilépticos que se están recetando (cual rosquillas, a decir de mi tía, farmacéutica) como "estabilizadores del ánimo"... oir la historia de la ketamina es un poco alucinante, nunca mejor (?) dicho.
<br><br>Cuando empezó a consumirse como droga entre los chavales, aquí, en Asturias, lo que a mí me contaron algunos de ellos es que, aunque sea un anestésico (y lo que suelen saber y decir es que es "un anestésico para caballos"), da un enorme subidón de ánimo, mayor que el que producen otras sustancias.
<br><br>Desde luego, ver a un chaval "puesto" de ketamina, da pena.<span style="font-style: italic;"></span><br><br><div><span class="gmail_quote">2006/8/8, José Ángel Morente <<a href="mailto:msxjam@gmail.com" target="_blank" onclick="return top.js.OpenExtLink(window,event,this)">
msxjam@gmail.com</a>>:</span><blockquote class="gmail_quote" style="border-left: 1px solid rgb(204, 204, 204); margin: 0pt 0pt 0pt 0.8ex; padding-left: 1ex;">
On 8/8/06, Abel Flórez <<a href="mailto:abel.florez@gmail.com" target="_blank" onclick="return top.js.OpenExtLink(window,event,this)">abel.florez@gmail.com</a>> wrote:<br>> Es un poco peligroso, no? Desde mi desconocimiento médico supongo que el
<br>> mismo principio activo que causa las alucinaciones será el que "cura" la
<br>> depresión, pero eso puede ser tomado como una falsa sensación de bienestar<br>> que será poco duradera. Eso no es curar. Es poner un parche.<br><br>Pues entonces me resulta incluso poco responsable que se publiquen
<br>artículos como ese, más sabiendo que cualquier joven que lo lea puede<br>sentirse aún más alentado al consumo de esta sustancia como droga<br>habitual.<br><br>--<br><a href="http://mastropiero.stumbleupon.com/" target="_blank" onclick="return top.js.OpenExtLink(window,event,this)">
http://mastropiero.stumbleupon.com/
</a><br>_______________________________________________<br>Escepticos mailing list<br><a href="mailto:Escepticos@dis.ulpgc.es" target="_blank" onclick="return top.js.OpenExtLink(window,event,this)">Escepticos@dis.ulpgc.es
</a><br><a href="http://correo.dis.ulpgc.es/mailman/listinfo/escepticos" target="_blank" onclick="return top.js.OpenExtLink(window,event,this)">
http://correo.dis.ulpgc.es/mailman/listinfo/escepticos</a><br></blockquote></div><br>