[escepticos] Ley de Benford

[Francisco Mercader]

[Pedro J. Hdez]
Yo añadiría que, a pesar de que Rajoy ha hecho de Zapatero un Winston
Churchill (la comparación no es mía), tengo mis serias dudas de que 
haya
cogido ningún sobre. Un registrador de la propiedad tiene formas "más
dignas" de corromperse durante una burbuja inmobiliaria que pillar 
unas
decenas de de miles de euros de un tipejo de dudosa reputación cuyo
despacho era un búnker hasta dentro de Génova. Pero en fin, a los 
mejor uno
tiende a sobreestimar las capacidades intelectuales del personaje.

[Mercader]
Lo que minusvaloramos es la capacidad humana para encontrar normal  lo 
que le beneficia.
Yo apostaría a que, en la mente de estos personajes, corre  un proceso 
que  ha aceptado   lo de recibir sobres  sin siquiera clasificarlo 
como bueno o malo.
Cuando yo era examinador de Tráfico y  mi sueldo era miserable, a 
alguien se le ocurrió complementarlo con  algo que llamaban 'bufanda' 
mensual   que no aparecía en la nómina y que venía precisamente en un 
sobre (aún recuerdo el color beige ) con contenido variable pero que 
oscilaba entre dos  mil y  tres mil pesetas (de las de los años 
ochenta). Recuerdo perfectamente cómo lo abríamos raudamente para ver 
qué contenía  pero  también me acuerdo de la falta de remordimiento o 
de conciencia ética con que, después de no haber movido un dedo para 
merecerlo,  lo sacábamos del sobre y lo metíamos al bolsillo.  Ninguno 
de nosotros  protestó   nunca  por el "regalo" y hubiese sido digno de 
ver qué cara hubieran puesto los demás de haber surgido entre nosotros 
una voz  autoinculpatoria.   Tal vez, el hecho de que nuestro sueldo 
llegaba a duras penas  para la subsistencia (siempre había  equivalido 
al de un mileurista actual)  ayudaba a encontrar  la limosna como algo 
justificable y merecido.  También es significativo  que no me haya 
vuelto a acordar de ello hasta  este episodio de los  sobres  peperos.
Estoy seguro de que, aunque  la posición económica de los dirigentes 
del PP no se parezca a lo que he descrito, el mismo mecanismo ha 
debido de funcionar en estos cuyas caras  pretenden expresar sorpresa 
e indignación al verse acusados.
Tengo que reconocer también que al confesar mi propia condición de 
"sobrecogedor" una parte de mí me quiere  justificar diciendo "pero es 
que era muy poco  dinero... y me venía muy bien... y me explotaban"
 con lo que parece demostrarse que los humanos disponemos de mil 
recursos para  tranquilizarnos.
También he de decir que cuando leo por aquí  alguna inflamada soflama 
ética, no dejo de pensar que también debe de obedecer a algún 
mecanismo inconsciente de compensación, de alguien que olvida que su 
carne es la misma que la de un pepero de estos tan populares.
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Mis residuos mentales:
http://personal.telefonica.terra.es/web/fmercaderr
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